¿Quiénes estamos detrás del mostrador?

Una churrería hecha con dedicación

Le presentamos nuestro trabajo, nuestras raíces y la forma en que llevamos adelante cada jornada. 

Una historia que empieza con usted

Crecimos gracias a su confianza

No empezamos grandes, ni con todo hecho. Empezamos con un producto claro, una idea sencilla y muchas ganas de hacer las cosas bien. Cada cliente que nos ha visitado nos ha ayudado a crecer, y por eso seguimos esforzándonos cada día. Somos parte del barrio y eso se nota en la forma en que trabajamos.

Nuestro compromiso diario

Nos levantamos temprano para que todo esté listo cuando usted lo necesite. Preparar productos frescos requiere tiempo, organización y ganas de hacerlo bien. No improvisamos ni recortamos en lo importante: la calidad y la atención.

Personas que disfrutan lo que hacen

El equipo que hace
posible todo

Detrás de cada producto hay alguien que ha aprendido a hacerlo bien. Nos conocemos, nos respetamos y sabemos qué significa ofrecer un buen servicio. Esa unión se nota tanto en el sabor como en la atención.

Conectados con el barrio

Cercanía que no se finge

Atendemos a quienes vienen desde siempre y a quienes nos conocen por primera vez. Sabemos quién entra, qué suele pedir, y cómo le gusta. Ese tipo de relación es la que nos mueve a seguir cada día.

Un local que cuida los detalles

Hemos adaptado el espacio para que se sienta cómodo, sin perder la esencia tradicional. Limpieza, orden y buena atención son parte de lo que ofrecemos, junto con nuestros productos.

Lo que define nuestra forma de trabajar

Constancia, honestidad y atención directa

Producto siempre fresco

Nos organizamos para que todo lo que se ofrece esté hecho el mismo día.

Trato respetuoso

Le atendemos como merece, sin prisas pero con eficacia.

Precios claros

No hay sorpresas. Todo está visible y explicado, sin añadidos.